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El cansancio pudo con el equipo
Domingo, 11 de Diciembre de 2011
El equipo zamorano gana con total justicia a todo un clásico de la categoría como es el Gran Canaria y se acerca a la permanencia
FICHA TÉCNICA
Caja Rural Tintos deToro 75 Gran Canaria 2014 La Caja de Canarias 63
Caja Rural Tintos de Toro: Gema García, Lisa Karcic (13), Aja Parham (12), Bernice Mosby (18), Taru Tuukkanen (14) -cinco inicial- Alba García (3), Mariona Ortiz (5), Laura Gimeno (4), Yinka Olorunnife (6).
Gran Canaria 2014 La Caja de Canarias: Leticia Romero (7), Vanessa Ble (19), Astou Ndour (6), Elina Dillone, D'Andra Moss (23) -cinco inicial- Eva Montesdeoca, Patricia Argüello (8).
Parciales cada cinco minutos:4-11, 14-19 // 26-28, 36-37 // 46-42, 58-52 // 66-60, 75-63
Árbitros: Juan Carpallo y Raúl Alonso. Eliminada por cinco personales Astou Ndour (35´).
Incidencias: Partido correspondiente a la novena jornada de Liga Femenina disputado en la mañana de ayer en el Pabellón Angel Nieto con unas 1.000 personas en las gradas. Las cámaras de Teledeporte retransmitieron en directo el encuentro.
Manuel López-Sueiras
El Caja Rural Tintos de Toro dejó bien claro ayer que es un equipo de la máxima categoría y en ella quiere quedarse este año tras ganar con autoridad su tercer partido y hacerlo ante uno de los clásicos de la categoría que alterna este año la Liga con la competición europea. El equipo zamorano cuajó su mejor partido de la temporada de su debut en Liga Femenina como lo demuestra el hecho de que todas sus jugadoras terminasen con valoraciones positivas, aunque por encima de todas destacó la norteamericana Aja Parham que no sólo anotó 12 puntos, metió dos triples, capturó siete rebotes y dio cinco asistencias, sino, lo que es más importante, defendió con uñas y dientes y terminó por anular a su paisana D'Andra Moss a la que dejó en un vergonzoso 1/8 en triples.
Estaba claro que el objetivo del Zamarat ayer era frenar el poder anotador de Moss, una alero muy fuerte físicamente y que está promediando más de veinte puntos por partido, pero también era fundamental aprovechar la gran cantidad de rebotes que provocan sus lanzamientos. Y ahí, el Zamarat fue ayer claramente superior. Primero Taru Tuukkanen se encargó de trabajar intensamente sobre la que fue este verano subcampeona del mundo junior en la selección española con Mariona Ortiz, Astou Ndour, a la que endosó cuatro faltas personales antes del minuto 20, y terminó por mandar al banquillo en el 35. Era necesario además que el resto del equipo ayudase, y el resultado fueron los 9 rebotes de Mosby, los cinco de Karcic y Gimeno, los cuatro de Alba García y Tuukkanen, y los siete ya citados de Parham. Ante este enorme trabajo dentro de la pintura, poco podía hacer un equipo que posee buenas jugadoras interiores pero tal vez un tanto inexpertas.
Parecía también una baza a jugar la de la profundidad del banquillo, una faceta a la que sabe sacar buen partido el Caja Rural Tintos de Toro pese a que sus rivales, como el de ayer, dispongan de más calidad. El Gran Canaria llegaba a Zamora tras un periplo de más de 20.000 kilómetros en avión y autobús en los últimos quince días para atender a sus compromisos nacionales y europeos, y alguna jugadora, como Patricia Argüello, no está en su mejor momento físico. Juan de Mena lo sabía y era consciente de que su baza tenía que pasar por la intensidad aún a costa de pasar en algún momento de los tiempos muertos que le pedía a gritos el público. Era cuestión de confiar en las posibilidades de uno mismo, de tener fe. Y la fe terminó por salvar a este equipo de retales que comienzan a zurzirse entre si para formar un tejido infranqueable. Astou Ndour se fue descalificando ella sola a base de personales, e D'Andra Moss, tras cuajar una magnífica primera parte, terminó agotada y lanzando pedradas a diestro y siniestro, fruto del desgaste físico al que le sometieron ayer Parham y Karcic, y, sin duda, también al agotamiento de demasiados partidos seguidos en las últimas semanas.
Bien es cierto que el Gran Canaria le metió el miedo en el cuerpo al principio a los numerosos seguidores que acudieron a ver ayer al Zamarat pese a que el partido lo emitía en directo Teledeporte. Sustentadas en una buena defensa individual, las canarias firmaban un 0/9 que llevó el marcador a un preocunate 4-16 cuando tan sólo habían transcurrido ocho minutos de juego. Esta vez el Zamarat había iniciado el partido con su ya habitual pájara de cada partido. Tan sólo Taru Tuukkanen, que ayer se enfrentaba a su marido, Maikel López, segundo entrenador del equipo canario, mantenía el tipo tanto en ataque como en defensa. Pero Aja y Bernice parecieron despertar, como recordando que les estaban viendo sus familiares y amigos por internet desde América, y permitieron que el primer cuarto se cerrase con un más tranquilizador 14-19. Lo peor había pasado, el Zamarat había superado su pájara y Aja seguía imparable para firmar el empate a 21 que comenzó a dejar en evidencia las carencias del rival. Poco después era Mosby la que se sumaba al festival de triples -diez firmaría el equipo zamorano en todo el partido- y ponía por delante al Caja Rural Tintos de Toro por primera vez. Moss seguía imparable, pero Tuukkanen también se sumaba al gremio de las artilleras para poner el triple que suponía el 32-32 y llegar en esta tónica de igualdad al descanso, no sin antes cometer su cuarta personal la principal "poste" del equipo canario.
Domingo Díaz sabía que tenía que dosificar las fuerzas de sus jugadoras y proteger a Ndour de las faltas por lo que ordenó una defensa en zona 2-3 que sería su ruina porque Karcic, Alba García y Yinka se encargaron de torpedearla desde el perímetro. El Zamarat comenzaba a cobrar ventajas significativas en el marcador (52-46 en el minuto 27 y 58-52 sobre la bocina con una canasta de Mosby). Resultó además fundamental que el último cuarto comenzase con canasta zamorana. Ya no importaba mucho que Parham cometiese su cuarta personal porque Yinka continuaba acertada en los triples (65-58).
En las filas del equipo visitante tan sólo mantenía el tipo ya Vanessa Ble que terminaría siendo la mejor de las canarias y ella anotaba el 60-65 que mantenía la tensión cuanto todavía faltaban cinco minutos para el final. Pero Juan de Mena pidió un tiempo muerto y Mariona anotó el 68-60. Con 69-63 a falta de poco más de un minuto volvió a cundir el pánico en el Angel Nieto. Moss fallaba un nuevo triple y la contra zamorana se convertía en el 71-63 con una brillante canasta a aro pasado de Lisa Karcic que sentenció la contienda. Tercera victoria, y la permanencia que cada vez está más cerca: Burgos y Hondarribia serán los próximos rivales y ambos asequibles para mantener esta buena marcha.
Mena: «Ha sido una victoria de equipo, de rotación»
«Cuando la gente se siente cómoda y confianza sobre la pista es capaz de hacer muchas cosas».
Juan de Mena valoró positivamente el juego de sus chicas en el partido de ayer: «Para mi, lo más importante es que ha sido otro partido consecutivo en el que todas mis jugadoras valoran en positivo y ha sido una victoria de equipo, de rotación, de poder llegar frescas al final con todo el mundo aportando e incluso con algunas jugadoras que han jugado menos de lo debido en función de su rendimiento. Pero esto es por lo que hemos apostado, por ser un equipo largo y hoy hemos recogido los frutos».
El entrenador del Caja Rural Tintos de Toro continuó analizando el flojo comienzo del partido que firmó su equipo: «A veces simplemente hay que dejar que las cosas sucedan, seguir confiando en lo que llevas trabajado y tampoco conviene cambiar nada. No pedí tiempo muerto porque confío bastante en mi equipo, en que poco a poco encontráramos la dinámica. Porque quizás comenzamos demasiado tensionadas y eso te hace ser poco preciso y este es un juego de precisión. Pero poco a poco nos fuimos metiendo en el partido porque no era un problema de actitud o de que estuviera fallando algo. Simplemente estábamos cometiendo errores. Entonces uno espera a que las cosas se reconduzcan e intento no poner nerviosas a las jugadoras para que puedan sentirse cómodas en la pista como creo que, durante muchos minutos, se han sentido. Y cuando la gente se siente cómoda y con confianza, es capaz de hacer muchas cosas». Juan de Mena ya tenía claro desde antes del partido que la clave estaría en el rebote: «Lo primero que miré en la estadística fue eso y ha sido una de las primeras veces, la otra fue contra Ibiza, en las que hemos dominado el rebote que es normalmente donde nos masacran. Sabíamos que Moss nos iba a meter un montón de puntos con unos porcentajes que han sido buenos en tiros de dos, pero no en triples. Sacrificamos una jugadora para estar encima de ella, la hemos defendido con gente diferencia cambiando en algún bloqueo. Pero no creía que esa fuera a ser la clave del partido. Sus pívots son muy atléticas y eso nos suele costar defenderlo, pero hoy todas nuestras jugadoras han reboteado con verdadera fiereza y para mi ha estado ahí la clave, en no conceder segundas opciones». Juan de Mena destacó también el trabajo de sus jugadoras taponando: «Hemos estado muy duras, saltando a todo y a partir de ahí, ellas cargan mucho su juego sobre una jugadora sola y lógicamente, así no deberían poder ganar. Vanessa Ble hizo muy buenos números, pero las demás pívots, no».
El técnico zamorano destacó asimismo el trabajo realizado por Taru Tuukkanen sobre Astou Ndour: «No solo la cargó pronto de personales sino también le sacó la quinta. Ella es una jugadora de altísimo nivel y para nosotros ha sido fundamental lo inteligente que ha estado Taru buscándola, encontrándola y consiguiendo sacarla del partido».
También explicó Mena que «ya era hora de que tuviéramos un día bueno en el tiro. Pero es que hemos jugado cómodas y con confianza. Lisa y Alba García son dos grandes tiradoras; el resto no pero tienen buena mano. La diferencia hoy ha estado en que se han sentido cómodas, que el público nos ha llevado en volandas, teníamos muchas ganas de ganar y hemos tenido premio».
Domingo Díaz: «Ha habido un equipo mejor que el otro»
Domingo Díaz regresaba ayer al pabellón donde se proclamó campeón de España juvenil con el Sandra Gran Canaria en 1993 y lo hizo encajando una derrota que asumió con resignación: «Ha sido un partido muy bonito para ver desde la grada, muy duro para estar en el banquillo del equipo perdedor, pero lo único que puedo hacer es felicitar a mis jugadoras porque, después de unos viajes muy largos y con los problemas físicos que hemos ido arrastrando, hemos estado en el partido durante 30 minutos, en el último cuarto hemos estado a punto de acercarnos en un par de momentos y quizás la precipitación y el cansancio nos pasó factura».
El técnico grancanario reconoció que «las faltas personales de Astou Ndour nos condicionaron en nuestro juego. Tuvimos bastantes problemas en el rebote defensivo y nada más. Ha habido un equipo que ha sido mejor que el otro y ha ganado merecidamente». Díaz añadió que el desgaste físico de D'Andra Moss fue decisivo: «Ha hecho un gran esfuerzo en las últimas semanas, ha intentado llevar el peso del equipo, y éste es un equipo muy joven. Ella tira del carro y llega a los últimos minutos diezmada. Quizás nos falta un pasito adelante de otras jugadoras que podrían ayudar pero, con los problemas físicos y el cansancio, no hemos estado a la altura deseada. Incluso ella se ha precipitado en algunos ataques y no ha sabido leer el partido en los minutos finales y de ahí que la diferencia haya sido tan amplia al final. En esto del deporte no existe la justicia, pierdes de 12 porque te lo mereces».
Gimeno: «Hay que seguir en esta línea»
La pívot del Caja Rural Tintos de Toro Laura Gimeno reconoció que «después del partido de Zaragoza, jugamos muy motivadas porque sabíamos que este partido iba a estar muy reñido y queríamos sacarlo adelante. Y así ha sido al final. Hemos ido a por todas y lo hemos conseguido».
Gimeno reconocía que el comienzo del partido no fue bueno, pero «esa motivación también te hace salir muy alterada. Igual nos hemos precipitado un poco pero luego hemos logrado coger la dinámica que queríamos, hemos defendido a su jugadora principal muy bien, ya sabíamos que Moss iba a tirar mucho pero la hemos parado bien. Sabíamos que el rebote era una baza suya muy fuerte pero lo hemos bloqueado bien y hemos podido ganar».
La pívot zaragozana elogió el buen trabajo defensivo de su equipo y no se asombró que Moss fallase muchos tiros al final porque «cuando te están todo el rato defendiendo, al final acabas fallando. Nosotros, al final hemos estado acertadas que era lo que nos había faltado en algunos partidos que parecía que se nos encogía la mano y hoy no ha sido así. Ya tocaba. Trabajamos mucho para meterlas y por fin lo hemos conseguido hoy al final». Laura Gimeno promete que el equipo va a seguir «trabajando en esta línea para ganar todos los partidos que podamos. Hoy se ha demostrado que podemos hacer muy buen baloncesto que podemos jugar contra equipos muy intensos y estar a su nivel», concluyó.
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